Latinoamérica

«El feminismo es bonito, pero no hay que atacar…

Como soldado, fundó una escuelita en Altos de Cazuca, un lugar donde los niños nacen curtidos como hombres. Cambió el camuflaje por el ágora, lucha por los derechos de las mujeres y se infiltró en una red de trata de blancas. Creó el primer partido político de mujeres en el mundo, Nuevo GEN, cuya meta es fundar el Ministerio de la Mujer en Colombia, un lugar donde muere una mujer al día. “Porque no creo en estar aquí por estar, sino en dejar huella”. Habla Nancy Vergara, candidata al Congreso de Colombia. 

Nancy Vergara desde la Plaza Vieja. Foto por Melanie Lupiáñez

Dijo una frase en una entrevista: “Un hogar no se edifica sobre una roca un hogar se construye sobre una mujer»

 “Así es, pero el hombre es nuestro complemento. El feminismo es bonito, no hay nada más bonito que una mujer y venimos de una mujer pero no hay que atacar al hombre; están nuestros padres, nuestros abuelos, nuestros ancestros. Mis dos hijos son varones.”

Este es el principio de la colomboespañola. Durante su campaña al Parlamento Europeo en 2019 con el partido por los Eurolatinos MIEL, sintió el rechazo de los grupos feministas madrileños y catalanes. “Yo les decía: no hablemos al mismo tiempo porque  cuando vayamos todas para un mismo lado esto va a cambiar. Y tenía que hablar duro, porque así se habla en España”, sobre sus piernas un coqueto bolso Gucci que sujeta con firmeza mientras enfatiza las palabras, siempre con una sonrisa amplia.

En la Madrid Woman´s Week de 2019 arrebató el premio a Ophra Winfrey…

Si Ophra llevaba el asunto del acoso y yo trabajaba con la trata de blancas y el tema de las niñas que son violadas en los campos. Me infiltré en un vuelo hacia República Dominicana con una niña, pedí un asiento a su lado, me contó su historia y cuando llegamos ella ya estaba lista para trabajar como prostituta. Ella sabía perfectamente a lo que iba pero la culpa la tiene el Estado porque permite que la gente migre sin ese control. 

 Crearon una agencia de viajes en Barcelona y le venden a niñas tiquets baratos para pagarles con trabajo en España. Llegan acá y no es el trabajo que les prometieron, sino prostitución. Desde España, las trasladan a República Dominicana donde está la red de prostitución más grande del mundo.

Aunque ellas lleguen con pasaporte de turistas, el Gobierno debería investigar porque las traen engañadas; bueno algunas lo saben y quieren pero las que no…

Es un proyecto con la trata de blancas donde si hay los recursos necesarios quiero seguir trabajando.

Nancy Vergara pasea con una de las mascarillas que fabricaron en cuarentena por la Calle de las Tiendas de Almería. Foto por Melanie Lupiáñez

En la cuarentena obligatoria del pasado 2020 -debido al COVID 19- fueron asesinadas por la violencia de género en el país andino 37 mujeres, según informó en rueda de prensa la representante de ONU Mujeres en Colombia, Ana Güezmes. Ante la situación, la protagonista de esta historia hizo un taller de mascarillas donde se empleaban 5000 mujeres maltratadas en turnos de 8 horas. Eran ellas mismas quienes a través de una llamada a la Fundación Firmes con las Mujeres daban la alarma, después se deriva con la policía y la fiscalía, quienes tomaban cartas en el asunto.

“Durante ese tiempo estaban fuera de casa, lejos del agresor. El lema era: ‘Tapadas, pero no calladas’. Al inicio de la pandemia empezamos una campaña ‘Mujer salva los tuyos, quédate en casa’; las mujeres se grababan y transmitían el vídeo por redes sociales, la campaña dio la vuelta al mundo hasta que llegó la epidemia de la violencia. Entonces desarrollamos este proyecto que permite a las mujeres denunciar a pesar de llevar mascarilla. Fue un éxito total, vendimos millones de mascarillas”, Vergara luce una de esas mascarillas, es morada claro de papel, “perfectamente homologada y 99% de filtración probadas en el laboratorio”, dice la activista.

Realmente ¿de dónde le viene este espíritu tan fuerte? 

Yo creo que, de mi mamá, ella sufrió mucho maltrato y, sin embargo, nunca se ha hecho víctima de eso. Mi madre tuvo que volver a Almería con todos nosotros pequeños, somos 6 hermanos y empezar de nuevo. No sé cómo lo hizo.

El abuelo materno de la activista era un militar almeriense que huía de la cruenta Guerra Civil española de 1936, arribó a Cartagena de Indias en Colombia después de 3 meses de travesía. El propio embajador español le dijo que renunciara a su nacionalidad pero el hombre se negó. “Gracias a que se negó, ahora nosotros tenemos doble nacionalidad. Lástima que se haya ido. Hubiera querido tenerlo siempre, me da mucha nostalgia, tenemos un ángel en la eternidad”.

Su antepasado tendió un puente entre los dos países hispanos, pues retornó 16 años después y crio a todos sus hijos en la Puerta de Purchena. Ahora Nancy es la única que todavía no se ha afincado definitivamente en la ciudad donde el sol pasa el invierno, pero es una meta cercana.

Y hablando de hojas de vida, la suya es una declaración de intenciones…

Durante 2 años fui soldado del PM13, del ejército miliar. Fue muy duro entramos 80 mujeres y solo nos graduamos 5. No fue fácil, nunca será fácil para una mujer, pero ese trato fuerte es psicológico a ver hasta donde tú eres tan fuerte.

La carrera militar la aproveché para hacer trabajo social me iba con mi camuflado a la parte más pobre de Colombia a Altos de Cazuca y creamos una escuelita de tres plantas donde fueron escolarizados 350 niños. Era una población vulnerable, niños desplazados por la violencia, hijos de grupos al margen de la ley.

¿Qué paso con la escuela entonces?

La escuela se convirtió en la fundación Fundea desde el año 2006 , y de ahí el lema de Jean Monnet: “los hombres pasan, pero las instituciones quedan”. Cuando regresé a aquel lugar a hacer campaña pensé que me iban a sacar corriendo y no, muchos de aquellos niños me saludaban y ya son adultos. Esa es la satisfacción con la que me quedo. Lo más importante y de gran valor es el amor y la gratitud.

¿Cuándo nació la fundación Firmes con las Mujeres?

A partir de que entregué la escuela quise seguir con esa parte social. Así nació la parte política en la pasada campaña queríamos entrar al Senado pero había una orden para que no nos registráramos. Necesitábamos 50.000 firmas y reunimos 560.000 firmas en tan solo 20 días, imagínate, todas las mujeres firmaban, nos apoyaban. Al día siguiente nació Firmes con las mujeres, pues la camiseta que usamos para recolectar firmas es nuestra insignia.

Detalle de la pulsera FIRMES POR LAS MUJERES. Foto por Melanie Lupiáñez

¿Por qué le denegaron el registro?

Porque detrás de mí y de la fundación no hay nadie, solo Dios. Todo lo hacemos con trabajo y muchas ganas de contribuir a la sociedad, lo que a veces disgusta. Porque yo tengo la autoridad y la autonomía de hacer mi campaña sin deberle un favor a nadie y además son muchos los mandatarios que piden nuestro apoyo. Yo me voy a Colombia a hacer mi campaña con pocos recursos, pero con la convicción de que vamos a llegar al Congreso y cambiar en algo la historia del país, pero sobre todo de las mujeres.

¿Cuál es su propósito con el Partido Nuevo Gen (gente emprendedora nacional)?

Cada partido tiene su ideología pero, en mi caso, la política es diferente. Se trata de una serie de puntos que queremos llevar y todos a favor de la mujer; madres cabeza de hogar, proyectos ambientales y alimentarios son prioridad. Quiero estar un solo período en el congreso y no más, fundar el Ministerio de la Mujer.

Simplemente quiero cumplir las metas, los sueños y hacer historia, dejar huella. Tal vez es eso, no pasar desapercibido en la vida. Creo que cada ser humano tenemos una meta en la vida. Me siento muy orgullosa de mis logros los cuales serán el legado de mis hijos.   

Nunca imaginé el poder que podía tenía una camiseta que ha dado la vuelta al mundo y ha vestido a 10 presidentes, como Nayib Bukele (El Slavador) o Antonio Sola, reconocido por ser el Creador de presidentes. Esta prenda financia a la fundación en los viajes, hoteles, vuelos y sólo es una camiseta; pues, ¿Qué no podría hacer con una credencial, sino crear una ley que cambie la historia de la mujer en Colombia?

Vicky García recibe una camiseta de Firmes por Las Mujeres. Foto por Melanie Lupiáñez

 ¿Una mala experiencia que haya tenido durante estos años?

Hace 6 años cuando estaba Santos como presidente el medio de comunicación RCN, uno de los mayores colosos del país me hizo una fake news. Al principio, me lo tomé a risa pero afectó a la salud de unos de mis hijos y la mia, tuvimos que irnos de la casa porque teníamos a prensa en la puerta todos los días. Me llamaron corrupta, embustera y de todo. Sabía que nada era verdad, obvio que en mi Facebook tenía fotos con Uribe, el registrador de senadores de la época y mucha gente influyente porque siempre me he rodeado bien.

Aunque el fiscal general, Nestor Humberto Martínez, se pronuncia a mi favor donde piden disculpas, esa noticia sigue circulando, maltratando mi honra y la de mis hijos, a pesar del daño que le hicieron a mi familia siempre he creído en la justicia divina.

¿Cómo construiría una sociedad más justa?

Pues exactamente siendo más justos. Que no haya ni feminismo, ni machismo, que seamos uno. Somos seres humanos cada uno luchando por su causa. Ante todo, el respeto y las oportunidades porque en pleno siglo XXI, las oportunidades de las mujeres no son las mismas que las de los hombres.

Aunque se está trabajando mucho a nivel mundial para que sea equitativo pero falta mucho o las leyes, están muy débiles. Tiene que haber el 50 y 50% siempre, la paridad. Poder llegar al Congreso con el apoyo de la sociedad en las urnas para lograr establecer el Ministerio de la Mujer que ya expusimos ante el Consejo de Ministros.

Y con cosas  sencillas, pero que cambian la vida, por ejemplo en Colombia todavía no hay una ley donde puedas cambiar tu apellido. Yo llevo el apellido de mi padre primero y lo quiero cambiar por el de mi madre por todo lo violento que él fue.

Una sociedad más justa se hace con la verdad, que la gente respete y aprenda a aceptar sus errores.

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